Romans 7:7-14

JBS(i) 7 ¶ ¿Qué pues diremos? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque (tampoco) conocería la concupiscencia, si la ley no dijera: No codiciarás. 8 Entonces el pecado, cuando hubo ocasión, obró en mí por el mandamiento toda concupiscencia. Porque sin la ley el pecado estaba como adormecido. 9 Así que, yo sin la ley vivía por algún tiempo; mas venido el mandamiento, el pecado revivió, y yo morí; 10 y hallé que el mismo mandamiento, que era para vida, para mí era mortal; 11 porque el pecado, habida ocasión, me engañó por el mandamiento, y por él me mató. 12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, y justo, y bueno. 13 ¿Luego lo que es bueno, a mí me es hecho muerte? No; sino el pecado, que para mostrarse pecado por lo bueno, me obró la muerte, haciéndose pecado sobremanera pecaminoso por el mandamiento. 14 ¶ Porque ya sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido a sujeción del pecado.